Termómetro de resistencia TR10-H

El termómetro de resistencia sin vaina TR10-H de WIKA es especialmente adecuado para aquellas aplicaciones en las que la punta metálica del sensor se monta directamente en orificios perforados (p. ej., en componentes de máquinas) o directamente en el proceso para cualquier aplicación sin medios químicamente agresivos ni abrasión.

Para el montaje en un termopozo, debe preverse un accesorio de compresión con resorte, ya que sólo éste puede presionar la punta del sensor contra el fondo del termopozo. De lo contrario, podría ejercerse una fuerza potencialmente crítica sobre la punta de medición. Por lo general, el montaje se realiza directamente en el proceso. Existen elementos de fijación opcionales, como racores roscados, tuercas de unión, etc.

La parte flexible del sensor es un cable con aislamiento mineral (cable enfundado). Consiste en una funda exterior de acero inoxidable en la que se presiona y aísla el conductor interno dentro de una masa cerámica de alta densidad. La resistencia de medición está conectada directamente a los conductores internos del cable enfundado y, por lo tanto, también es apta para su uso a temperaturas más elevadas.

Gracias a su flexibilidad y a los pequeños diámetros posibles, los termómetros de resistencia cerrados también pueden utilizarse en lugares de difícil acceso, ya que, salvo la punta del sensor y la transición del cable de conexión, la vaina puede doblarse hasta un radio tres veces mayor que el diámetro del cable.